lunes

HISTERIA COTIDIANA (CAPITULO UNO)

La histeria cotidiana logra que un trámite que normalmente dura horas, nos lleve apenas minutos. Y solo necesitamos una sonrisa mirándole la boca, un chiste malo, un escote no muy pronunciado, en definitiva, un poco de histeria.
En un relevamiento realizado entre solo conocidos, dio como resultado que el lugar ideal para la histeria cotidiana son los hipermercados y derivados. Sobre todo cuando se cruzan changuitos. Sí, en el mismo momento que estamos yendo hacia la góndola de los "fríos", nos encontrarnos con los ojos del otro changuito que se dirige a los embutidos. El mejor y el más popular de los encuentros histéricos: la mirada. Y si volvemos a encontrarnos en otro cruce de ojos soñaremos con algún encuentro futuro, con otro encuentro de pasillos, de changuitos, rumbo a góndolas distintas.
Estos centros comerciales sirven para eso, para histeriquear. Sirve para que las esposas miren a los esposos de otras. Sirve para que hombres y cajeras se miren mientras elijen en dónde pagar. Cajeras que tratarán de atraerlos con una mirada constante. Y será un logro histérico para quién consiga abducir a un hombre hasta la caja, mientras sin mirar pasa el código de barra de un Triatop por el lector.
Como será de cierto este relevamiento, que la gente se arregla para ir de compras. ¿Qué esperarían encontrar, más que productos en un Centro Comercial, para que valga la pena vestirse bien, si no fuera conseguir un poco de histeria?
Centros Comerciales: allá vamos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

geniooooooooooooooooo

sole dijo...

mmmm no estoy muy de acuerdo... odio ir al super y cuando estoy ahi solo pienso en comida.. jajaja!!
creo q un lugar en donde se puede utilizar la histeria para el beneficio propio es la aduana.. ahi con una miradita, una sonrisita y (la afortunada q puede) un lindo escote podes pasar todo tipo de electronica, tortugas extranjeras, y demas yerbas.... jajajaj!!!!

Anónimo dijo...

sole! pero no te parece que para histeria cotidiana la aduana es complicada. Va! no sé cuanto viajas o dónde trabajas jua pero la veo difícil.